Posicionamiento SEO: Primeros pasos

Estadísticas de tráfico web con Search Console

Para cualquier proyecto web, es fundamental contar con métricas para poder tomar decisiones basadas en datos.

En las páginas web, existen dos herramientas de Google, que resultan fundamentales e indispensables. Hablamos de Google Analytics y Google Search Console. Además, recientemente este tándem se ha unido para ofrecernos un producto denominado Search Console Insights.

  • Google Analytics, es capaz de mostrarnos las métricas de lo que ocurre una vez están en nuestra web, de dónde proceden, qué hacen, dónde están, qué pasos dan y finalmente cómo convierten y cumplen nuestros objetivos.
  • Google Search Console es capaz de enseñarnos lo que ocurre en el buscador más utilizado en el mundo con un 89% de cuota poniéndonos en contexto nuestra web. Además de darnos herramientas para mejorar nuestro SEO, nos muestra las consultas que los usuarios hacen y que Google entiende que tu web puede resolver esa intención, incluyendo porcentaje de click sobre esa impresión en la lista de resultados y la posición que ocupa.
  • Search Console Insights es capaz de mostrarnos información de valor en un vistazo reducido juntando y contextualizando la información de las dos anteriores herramientas. Muy recomendable para la toma de decisiones.

Éstas herramientas son fundamentales para cualquier proyecto y en ocasiones las suelen gestionar los administradores que no siempre resultan ser los dueños de los proyectos. 

Pueden tratarse de agencias, empresas o terceros por lo que en este artículo me quiero centrar en desvelar cómo pueden compartir el acceso a estas métricas entre los dos roles de cliente y proveedor. 

El tratamiento de toda esta información, planificar estrategias, corregir y detectar oportunidades de posicionamiento es lo que todo el mundo llama SEO, cuyas siglas son Search Engine Optimization, que en Español es Optimización del motor de búsqueda. Dicho de otra manera, lo bien que estés posicionado para aparece en lo de arriba de Google, sin pagar gracias al tráfico orgánico, que es el tráfico derivado de resolver intenciones de búsqueda en la barra del buscador de Google.

Por explicarlo de otra manera y con algún ejemplo:

Antonio tiene una tienda online pero la web se la lleva una pequeña empresa de marketing digital que le administra la web y le lleva las redes sociales. Dicha empresa le envía semanalmente un escueto informe de tráfico y en base a eso, Antonio toma decisiones. La propiedad del dominio la tiene la empresa y no Antonio. Tampoco cuenta con la información de Google Search Console

En base a este ejemplo,

  • ¿Cómo creéis que Antonio puede analizar en profundidad la situación de su tienda online y cómo puede enfocar el SEO?
  • ¿Cómo creéis que puede solicitar ayuda a un tercero para que le eche una mano con la situación de su web a nivel de posicionamiento web? 

Las respuestas son sencillas y escuetas: Antonio no tiene en su propiedad lo que es suyo.

El propietario de un negocio, que cuenta con una tienda online, una web, o cualquier otro tipo de activo digital, debe tener en propiedad el dominio y ofrecer permisos limitados a quienes les ayuden tanto en el servicio registrador del dominio, en Google Search Console y en Google Analytics.

De no ser así, corre el riesgo de: que se le caduque un dominio y no se entere, de no enterarse de las alertas y problemas SEO de la página y lo peor de todo, no ser capaces de ver qué está ocurriendo en la página. En resumen, puede llegar a ir a ciegas…

Si es tu caso y estás leyendo este artículo, ponte manos a la obra para hacer estos tres pasos (importante hacerlos por este orden) y dejarle claro a la persona o empresa que te esté ayudando que sigues contando con ellos y que esto lo haces por poner un poco de orden.

Paso 1: Transferir la propiedad del dominio y ser tú quien otorgue permisos puntuales.

Aquí cada empresa de servicios lo hace de una manera y no es un proceso inmediato ni sencillo. Además, en este caso necesitas que el primer paso lo de quien lo tiene, dado que será quien tenga que liberarlo a otra persona. Mi recomendación: llévatelo si puedes a Google Domains. ¿Por qué? Porque todos los demás pasos te serán más sencillos al ser el propio Google.

Una vez lo tengas, para ofrecer permisos a quien te ayude, accede a:

Configuración del registro → Usuarios → Añade un usuario

Importante, aquí no se puede establecer roles limitados, por los que te recomiendo que sólo los otorgues, cuando te ayuden con algún tema de DNS, sub-dominios o re-direcciones. Una vez terminen lo que te han explicado que tienen que hacer, se los quitas.

Paso 2: Transferir la propiedad de Google Search Console y ser tú quien otorgue permisos adecuados.

Tienes que acceder a Search Console, darle a Añadir propiedad y seguir los pasos. Si el dominio lo tienes en Google Domains, será coser y cantar y si lo tienes en otro, tendrás que hacer pasos tediosos, pero no imposibles. Te animo a seguir los pasos que te ofrecen antes de rendirte y pedir ayuda o buscar en Google.

Una vez lo tengas:

    • para ofrecer permisos a quien te ayude con el posicionamiento SEO, accede a: Ajustes, Usuarios y permisos, Añadir usuario, añades un usuario con permisos completos.
    • para ofrecer permisos a quien te quiere ayudar con la estrategia, las métricas o cualquier otra ayuda en modo lectura, accede a: Ajustes, Usuarios y permisos, Añadir usuario, añades un usuario con permisos restringidos.

Paso 3: Administrar la propiedad de Google Analytics y ser tú quien proporcione permisos adecuados.

En este caso lo haremos en dos pasos:

    1. El primero es que te otorguen los permisos máximos, entrando en Administrar → Despliega su cuenta → Despliega la propiedad del dominio → Gestión de accesos a la propiedad → Añadir usuario con todos los permisos.
    2. El segundo paso es una vez tú tienes los permisos completos, dejar los permisos:
  • Edición a quien te ayude con el SEO o el Marketing (importante quitarle el de los de Gestionar usuarios)
  • Leer y Analizar a quien te quiera ayudar con las métricas o la estrategia, darle las de  únicamente.

Con estos pasos hechos, ya serás tú el propietario real del activo digital y por tanto podrás tener el control. Podrás tomar mejores decisiones, basadas en datos y podrás pedir ayuda ajena a tu empresa habitual, de manera que puedas tener una segunda opinión.

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